La electroestimulación en el músculo esquelético es una nueva estrategia terapéutica con efectos prometedores en cuanto al tratamiento con pacientes con insuficiencia cardíaca crónica. Cuando la capacidad del ventrículo izquierdo es reducida en pacientes con insuficiencia cardíaca se producen una serie de cambios que conducen a una pérdida de músculo esquelético y anormalidades resultantes del metabolismo muscular. Por lo tanto, el mantenimiento de la masa muscular en pacientes con insuficiencia cardíaca es una buena estrategia para mejorar la disfunción del ventrículo izquierdo. Por ello, el entrenamiento físico podría ser una herramienta para romper este círculo vicioso debido a sus efectos beneficiosos y como algunos pacientes con insuficiencia cardíaca no están en posición de realizar entrenamiento físico tradicional, el uso de la electroestimulación puede ser una alternativa atractiva y elegante para realizar entrenamiento físico. Debido a ello, el objetivo de este estudio fue evaluar los efectos beneficiosos de diferentes estrategias de electroestimulación sobre la capacidad del ejercicio, el consumo de oxígeno y la función del ventrículo izquierdo en pacientes con insuficiencia cardíaca.
60 personas se sometieron al programa de electroestimulación en este estudio. 34 de las 60 personas con síntomas estables de insuficiencia cardíaca. De las 34, 22 personas recibieron electroestimulación de cuerpo completo y 12 recibieron electroestimulación en el glúteo, cuádriceps y gemelos. Los 26 restantes se establecieron en el grupo control que también recibieron electroestimulación a cuerpo completo para comparar los efectos de la WB EMS en personas con y sin insuficiencia cardiaca. En cuanto al protocolo de electroestimulación se utilizó una frecuencia de 80 Hz con un ciclo de trabajo de 4 segundos de impulso eléctrico y 4 segundos de descanso. En cuanto al umbral de intensidad se centró en la percepción del cliente porque la contracción muscular realizada por electroestimulación depende de la composición corporal y de la resistencia de la piel. El objetivo del entrenamiento se basó en una activación muscular suficiente pero sin llegar al umbral de dolor. El entrenamiento se realizó durante 10 semanas, dos sesiones a la semana y cada sesión fue de 20 minutos con WB-EMS.
Una vez que terminaron todas las sesiones de electroestimulación los 60 sujetos fueron examinados inmediatamente una semana después. El test se realizó con espirometría en cinta de correr. Todos los sujetos realizaron la prueba de acuerdo con sus habilidades personales, comenzaron con 10 W con un incremento de 10 W cada 2 min o por otro lado, comenzaron con 25 W incrementando 25 W cada 2 min. La prueba terminó cuando el sujeto tenía dificultades para respirar, agotamiento muscular, arritmia severa o mareos. Este test se realizó antes y después de haber realizado todas las sesiones de electroestimulación.
Al analizar los resultados en todos los grupos se dió un incremento en cuanto al consumo de oxígeno y en el grupo de electroestimulación de cuerpo completo con pacientes con insuficiencia cardíaca crónica mejoraron la capacidad del ventrículo izquierdo en comparación con el grupo que utilizó electroestimulación en cuádriceps, glúteo y gemelos.
Por lo tanto, analizando los resultados podemos llegar a la conclusión de que con la electroestimulación de cuerpo completo se mejora de forma significativa el consumo de oxígeno y la capacidad del ventrículo izquierdo en pacientes con insuficiencia cardíaca crónica.
Por otro lado, destacar que la metodología en cuanto a los test y las mediciones realizados en este estudio son muy buenos, por ello, podemos respaldar los resultados obtenidos. Sin embargo, por la falta de especificación del sistema de entrenamiento podemos pensar que se ha utilizado una metodología clásica de entrenamiento con electroestimulación de cuerpo completo.
Siendo así, vemos oportuno destacar que el entrenamiento con ejercicios funcionales y una periodización ondulante con electroestimulación a cuerpo completo es más efectivo que la metodología clásica de entrenamiento con electroestimulación de cuerpo completo [2]. Por tanto sería muy interesante comprobar que efectos se pueden obtener secuenciando las cargas eléctricas a los largo del tiempo y realizando ejercicios que no estén basados exclusivamente en posiciones estáticas y básicas durante el impulso eléctrico.
Nota informatíva
En este estudio no especifica si los participantes del estudio se sometieron a una adaptación previa a WB-EMS. Por ello, desde Wiemspro aconsejamos que antes de aplicar un protocolo de entrenamiento de WB-EMS, se debe pasar un periodo de adaptación con una frecuencia por debajo de 50 Hz sin llegar a intensidades de electroestimulación que puedan provocar un agotamiento alto durante al menos 6-8 sesiones.
Bibliografía
- Van Buuren, Frank Mellwig, Klaus Peter Prinz, Christian Körber, Britta Fründ, Andreas Fritzsche, Dirk Faber, Lothar Kottmann, Tanja Bogunovic, Nicola Dahm, Johannes Horstkotte, Dieter. (2013). Electrical myostimulation improves left ventricular function and peak oxygen consumption in patients with chronic heart failure: Results from the exEMS study comparing different stimulation strategies. Clinical Research in Cardiology, 102, 523-534.
- Amaro-Gahete, Francisco J. De-la-O, Alejandro Sanchez-Delgado, Guillermo Robles-Gonzalez, Lidia Jurado-Fasoli, Lucas Ruiz, Jonatan R. Gutiérrez, Angel. (2018). Functional exercise training and undulating periodization enhances the effect of whole-body electromyostimulation training on running performance. Frontiers in Physiology, 9, 1-12.